Hoy escuche que la alegría se encuentra en la misión y no puedo estar más de acuerdo con la expresión. En realidad, los mejores años de mi vida comenzaron cuando comencé mi misión, cuando arrancó Hola Ghana y comenzaron a pasar cosas extraordinarias. En primer lugar, encontré el sentido de mi vida, diseñando experiencias de voluntariado internacional para despertar conciencia y construir un mundo más humano, financiando proyectos de cooperación enfocados en emprendimiento y s

Estos días volví a tener la necesidad de hacer unas gestiones administrativas y me conecté con una estrategia que me ha ayudado siempre en la vida, el cambio de interlocutor o buscar las personas adecuadas que puedan ayudarnos. El incidente sucedió con Migración Colombia, donde un funcionario que trabaja por plata y no por propósito me atendió de manera desinteresada y rutinaria, sin dar solución a mi petición. Resulta que pedí un certificado de movimientos migratorios por co

Este fin de semana salí al campo, se me ocurrió llevar a mi perro y sucedió algo. Llegamos a la finca de unos amigos a ayudarles a plantar árboles y nada más bajarnos del coche llego un perro a saludarnos. Al minuto ya se estaba peleando con nuestro perro, y le mordía con ganas, así que no dude en meterme y empezar a soltar patadas. El perro me mordió pero conseguí separarlos, llego un segundo perro al que encaré y di una patada para asustarlo. Parecía Kung-Fu, pero entendí h

El otro día iba conduciendo mi esposa de camino a casa y por esquivar un coche se metió en un hueco y se estalló la llanta (Traducción al castellano: realizó un giro brusco y la rueda se exploto al entrar en un bache profundo). Me llamó para ayudarla y comenzó una gran aventura cotidiana. Resulta que eran casi las 8 de la noche y en la vereda donde vivimos la gente se acuesta tan pronto como las gallinas, por lo que salí a la calle y no se veía a nadie. Comencé a caminar a ve

Hace unos días ocurrió un incidente que me demostró que el corazón va más rápido que la mente. Resulta que iba conduciendo por Chía y de repente veo que dos jóvenes que iban caminando se cruzaron con otros dos jóvenes en una acera con poco espacio. Me dio la impresión que unos parecían jóvenes tranquilos, mientras que otros no tanto. Uno de los chicos que me pareció tranquilo, sin venir a cuento recibió el empujón de uno de los otros chicos. El joven se da la vuelta y le pide