Este viaje a España está siendo muy especial, admiro la belleza de cada lugar, disfruto de la compañía y enseñando lugares nuevos a Lucía.
Con el paso de los años más quiero a mi tierra, más quiero a mis amigos y mi familia. Como cada vez que regreso, adapto un poco el horario este mes, de las 4am paso a levantarme a las 5am, trabajo hasta las 10 o las 11am, después salgo y regreso a comer. Hago siesta sobre la 1.30h y cuando me levanto leo un rato con un café y me vuelvo a poner. Trabajo alrededor de una hora mientras Lucía se levanta de la siesta y volvemos a salir de paseo aprovechando estos días de verano en pleno invierno. De nuevo instalo mi entrenamiento personal, de 5 a 7am que me va fenomenal. A las 7am salgo a correr entre 40m y 1 hora, al regresar leo un rato y me ducho con agua fría, y ya estoy listo para cuando se levanta mi peque, a las 8.30 por lo general ya está en pie. Me rinden mucho las mañanas, me siento bien aprovechándolas. Soy una persona de rutinas y me funcionan, me ayudan a enfocarme, a avanzar cada día, a desconectar y compartir momentos de ocio además de trabajar.
En realidad los planes de estos días no son nada extraordinarios, pero resultan muy especiales, como jugar en la playa y bañarnos en un día soleado, como caminar y contemplar la bahía más bonita del mundo (estuve en Río y sigo pensando lo mismo), como trabajar con vistas al mar, como montar en bici por el pinar de Liencres con mis sobrinos, como tomar el aperitivo en una terraza o un tinto (a veces café a veces vino) al caer la tarde sin esperar al domingo, como hacer un picnic en Mataleñas y debajo de un árbol dormir la siesta, como compartir con mi familia un momento cualquiera, como hacer planes con buenos amigos que se convierten en historias para recordar cuando seamos viejitos.
De verdad siento que estoy viviendo una vida bien vivida, que tiene un propósito y una buena compañía, que me permite desarrollar mi potencial y también devolver a los demás, que me llena de energía para levantarme con ganas cada día, que busca trascender al final de mis días.
¿Qué es para ti una vida bien vivida?
